En el acto institucional de homenaje a los represaliados durante la dictadura franquista en la provincia de Ciudad Real, celebrado esta mañana en la Diputación Provincial, han intervenido junto al presidente José Manuel Caballero, el rector de la UNED, Alejandro Tiana Ferrer, y los profesores Francisco Alía, catedrático de Historia de la Universidad de Castilla-La Mancha, y Julián López García, director del Centro Internacional de Estudios de Memoria y Derechos Humanos y responsable del equipo de esta investigación.
Rector de la Uned
Alejandro Tiana, rector de la UNED ha señalado que este es un primer paso para recuperar la memoria histórica. Se ha mostrado orgulloso de contar con un equipo de investigación serio y riguroso y de colaborar con la Diputación Provincial de Ciudad Real. “Es fundamental estar seguros de lo que estamos haciendo y cerrar dignamente lo que ha supuesto la represión franquista por lo que me gustaría como Universidad colaborar en esta tarea”, ha comentado, apuntando su satisfación por contribuir modestamente con esta aportación histórica y seguir en la tarea de la recuperación de la memoria y la dignificación de los represaliados.
Franciso Alía
Por su parte, Francisco Alía ha aclarado que a pesar del avance que se ha hecho con esta investigación todavía no se está en condiciones de ofrecer datos definitivos sobre las víctimas represaliadas durante la dictadura franquista “y en muchos casos va a ser imposible porque no hubo registros civiles y va a hacer falta mucho tiempo para ir desempolvando todos los archivos”
Alía ha destacado que la provincia de Ciudad Real es una de las provincias de España mejor investigadas y ha agradecido a la Diputación el apoyo a esta investigación y a perpetuar una reparación de este problema.
Julián López
Julián López García, director del Centro de Estudios de Memoria y Derechos Humanos de la UNED ha mostrado también su agradecimiento a la Diputación por el apoyo prestado a la investigación iniciada hace ocho años. “Desde entonces hemos visitado centenares de casas y es como si nos estuvieran esperando”. Y ha asegurado que la recuperación de la memoria histórica se debe fundamentalmente a las mujeres de la provincia.
Ha indicado asimismo que la relación de las cerca de 4.000 víctimas todavía no ha terminado y se seguirá engrosando porque hay una relación de “suicidios” que está en la lista de dudosos, aunque es prácticamente asociable a la represión franquista.
Ha incidido en que Ciudad Real es la provincia con más víctimas mortales de la posguerra, matizando que esa brutal represión que se produjo en ella se contabiliza con 2.800 fusilamientos, una gran cantidad de muertos por garrote vil; 850 fallecidos en prisiones y en intentos desesperados de evasión, así como que se han encontrado muchos muertos de la provincia en otras cárceles del país.
Ha señalado que a la investigación le quedan todavía dos fases: el mapa de fosas para saber donde están enterrados y la dignificación de estas fosas en la medida que sea posible.